Queremos dar una nueva imagen y una nueva fisonomía a las Comunidades Eclesiales de Base” dijo Monseñor Braulio Sáez, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Santa Cruz y presidente de las Comunidades Eclesiales de Base que se preparan para iniciar mañana su Décimo Encuentro nacional. A tiempo de felicitar a todos los que están dispuestos a hacer el camino para llegar a Cochabamba y participar del X encuentro, insistió en la necesidad de estar abiertos a la acción del espíritu para promover una primavera en las comunidades y en toda la Iglesia.
Insistió también en la necesidad de participar con alegría e ilusión “Que vayan con una carta muy fuerte de entusiasmo, de alegría y de ilusión que queremos dar una nueva imagen y una nueva fisonomía a las Comunidades Eclesiales de Base en nuestra querida Bolivia, de hecho el tema es la “revitalización y el relanzamiento de las comunidades a nuevos horizontes y pienso que ese relanzamientos en este momento histórico es muy importante porque puede que las comunidades estén viviendo un cierto invierno o un cierto otoño, pero sabemos que después del invierno o el otoño viene la primavera y el verano y esperamos para las comunidades una primavera muy intensa, vivida con mucha ilusión y sobre todo con mucha disponibilidad a la fuerza del espíritu y sobre todo necesitamos frutos, necesitamos un nuevo rostro de Iglesia. Sabemos que las comunidades son ese fermento, esa primera célula de Iglesia que tiene que renovar toda la Iglesia para ser cada vez más misionera y cada vez más discípula de Cristo.
El lema de este encuentro habla de la “primavera” que buscan las Comunidades Eclesiales de Base para sí mismas y para toda la Iglesia, primavera que para algunos podría significar mayor número y presencia de las CEB`s, para otros podría significar mayor compromiso social , mayor impacto, o tal vez para otros un mayor dinamismo o activismo en las CEB`s. Al respecto consultamos a Monseñor Braulio ¿Qué significa esa primavera eclesial?, nos dijo “Mayor conciencia de ser Iglesia, porque cuando descubrimos que somos Iglesia, descubrimos que Cristo está en medio de nosotros y que nos impulsa a un nuevo dinamismo y no es que tengamos que tener más número de comunidades, ni más cristianos, sino que los que creemos en Cristo seamos más conscientes de lo que profesamos y lo que creemos y por lo que tenemos que trabajar. Y sobre todo mayor testimonio de vida, no solamente ser cristianos de nombre sino cristianos comprometidos, cristianos que viven su fe con entusiasmo”.
Fuente: http://www.iglesiasantacruz.org
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